Para mi el mito más raro sobre el cerebro es ese de que solo utilizamos un porcentaje muy pequeño de nuestro cerebro insinuando algún tipo de superpoder que aun no hemos explotado. A nadie se le ocurriría decir lo mismo de otros órganos como el corazón o el hígado, pero seguro que José sabe mucho más de esto que yo.
Hola!
Como bien dice María José, uno de los neuromitos más extendidos es el de que solamente utilizamos un 10% de la capacidad total de nuestro cerebro. Esto no es cierto, utilizamos toda la capacidad de nuestro cerebro de manera totalmente natural, no necesitamos ninguna técnica extraña para desbloquear su capacidad total.
Otro neuromito sería que el hemisferio izquierdo del cerebro es matemático y el derecho es el encargado de la creatividad. Tampoco es verdadero. Aunque hay zonas del cerebro más relacionadas con funciones más analíticas relacionadas con las matemáticas y otras zonas que se ven más activadas en momentos de creatividad artística, en neurociencia hablamos más bien de redes neuronales que se extienden por muchas zonas distintas del cerebro (casi siempre de los dos hemisferios) y nos ayudan en procesos cognitivos y comportamentales concretos (mantener la atención, realizar una actividad física coordinada, recordar algo, hablar, etc.)
Aunque hay muchos más mitos (como que jugar a juegos de «inteligencia» en el móvil nos hace más inteligentes), creo que esos dos son los más extendidos.
Estoy de acuerdo con la respuesta de Maria José. No tiene sentido ninguno que tengamos un órgano cuyo 90% esté en desuso. Sin embargo, para no repetir mito, dejaré otro. El mito de que un cerebro más grande implica una mayor inteligencia. Ni de forma relativa al tamaño del animal, ni mucho menos de forma absoluta. La inteligencia no tiene mucho que ver con tener un cerebro más grande.
Comentarios
Vary commented on :
Estoy de acuerdo con la respuesta de Maria José. No tiene sentido ninguno que tengamos un órgano cuyo 90% esté en desuso. Sin embargo, para no repetir mito, dejaré otro. El mito de que un cerebro más grande implica una mayor inteligencia. Ni de forma relativa al tamaño del animal, ni mucho menos de forma absoluta. La inteligencia no tiene mucho que ver con tener un cerebro más grande.