Es muy, muy difícil. Hay especies que son más fáciles de de controlar y de gestionar, evitando la invasion o al menos frenándolas para que no se extiendan más de donde están. Pero la erridacion casi siempre es imposible y ese control y gestión suelen ser muy, muy caros. Solo en Europa se gastan decenas de millones de euros al año en el control de las especies invasoras.
En ocasiones las especies invasoras son tan exitosas que ni siquiera es posible controlarlas.
Para el control de las plantas invasoras se utilizan desde métodos mecánicos (arrancar las plantas, talar los árboles o eliminar a mano todas las semillas, por ejemplo), químicos (herbicidas y otras sustancias tóxicas) y biológicos (introducir enemigos naturales de la especie a controlar, por ejemplo).
Comentarios